11 de junio del 2022

by Kimberly Hobbs 

EMPODERANDO VIDAS CON PROPÓSITO:
¿Alguna vez viajas por un camino en el que pareces preguntarte, adónde me lleva esto? Comienza divertido y aventurero, pero de repente te da miedo y te invade porque no sabes a dónde te diriges.
Cuando avanzas en el camino con la esperanza de encontrar tu camino, las cosas se vuelven claras de repente y te das cuenta a dónde te diriges. Sin ningún esfuerzo por tu parte, de repente se vuelve familiar y vuelves a respirar tranquila.
La gran noticia es que cuando Dios nos lleva por un camino hacia Su guía, a menudo podemos preguntarnos a dónde vamos, ¿por qué me embarqué en este viaje? Dios nos recuerda que no debemos temer en nuestra debilidad humana. Él tiene el camino ya trazado por nosotros. Caminamos por fe, no por vista.
Las cosas pueden parecer repentinamente desconocidas, pero es entonces cuando Él te dará la fuerza para sostenerlas y atravesarlas hasta llevarte al lugar que claramente ha puesto delante de ti.
 Sabrás por fe cuando ese destino te resulte familiar. Estarás viviendo en la fe que pusiste, no en la vista que estabas viendo y que no te era familiar. Dios se revelará a Sí mismo en la familiaridad de lo que Él ha preparado para ti. Confía en Él cuando no sepas hacia dónde te diriges. Confía en Dios, Él revelará Su poder.
Jesús la miró y le dijo: “¿No te dije que si crees en mí, verás a Dios revelar su poder?” (Juan 11:4)