8 de febrero del 2022

by Kimberly Hobbs 

EMPODERANDO VIDAS CON PROPÓSITO:
“Dios, ¿estás ahí?”
De innumerables situaciones críticas en mi vida, miro hacia atrás y digo: “Wow Dios, estoy tan contenta de que estuvieras ahí para mí”. En mis reflexiones que hago todo el tiempo cuando escribo cada día, veo que Él estuvo ALLÍ todo el tiempo para mí.
Puede que recuerdes situaciones en tu vida en las que Dios también estuvo allí para ti. Inténtalo, mira hacia atrás en las muchas historias dentro de la Palabra de Dios y observa dónde ha estado Dios allí para muchos otros en sus vidas a lo largo de Su palabra. Puedes leer sobre ellos y luego reflexionar sobre tus propias historias de tu vida: mírelos en estos tiempos de la vida moderna y observa cómo Su presencia “está” aquí para ti en el ahora y en tu pasado.
La verdad es que necesitamos crecer tanto en nuestra relación con Dios que podamos decir: “¡Dios estoy tan contenta, de que estés aquí para mí!”
A medida que mi relación con Dios crece más y más cada vez que oro, confío más y más en el PODER que obra dentro de mí… Efesios 3:20… tu confianza también crecerá. La oración te acercará más a tu Maestro.
La presencia de Dios nos permite experimentar bendiciones inesperadas a pesar de las circunstancias que se presenten. Los verás. Sí, a veces vienen a nosotros con dolor y dolor extremo, pero a la larga, muchos de nosotros vemos bendiciones ocultas si miramos lo suficiente y también las vemos cuando reflexionamos.
La belleza de orarle a Él y tener tus pensamientos en la perspectiva adecuada en tu mente con Jesús, te permite estar completamente consciente cuando Dios se mueve y cuando responde tus oraciones.
A pesar de las circunstancias que se te presenten, comprende que Dios está contigo. Él estuvo contigo en el pasado y también está contigo en el presente, ¡Él está contigo en este momento! ¡¡¡Dios te ama!!! Alguien que lea esto necesita este mensaje hoy.
¡Qué reconfortante es comprender esta verdad, Él está contigo! ¡Él está aquí! ¡Ahora! CONTIGO!
“Se fuerte y valiente. No temas ni te asustes por causa de ellos, porque el SEÑOR tu Dios va contigo; nunca te dejará ni te desamparará” (Deuteronomio 31:6)
 Por favor, aférrense a esto diariamente, cada hora, minuto a minuto, oren continuamente y “Descansen y esperen” en Él. Siempre y para siempre, ¡Él nunca te deja!