3 de mayo del 2022

by Kimberly Hobbs 

EMPODERANDO VIDAS CON PROPÓSITO:
Escritora invitada: Laurie Sammarco de Pembroke Pines, FL.
“La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden.” Juan‬ ‭14:27‬ ‭NVI‬‬
Somos humanos y hay días en que nos preocupamos por cosas que están fuera de nuestro control. Nos aferramos a los “qué pasaría si” como si pudieran predecir lo que sucederá cuando en realidad estamos tomando prestados problemas cuando deberíamos estar descansando en Dios y encontrando nuestra paz con Él.
 A veces, la preocupación puede ser como un perro con una correa que de repente se quita y te arrastra con Él, luchando por el control, tratando de controlarlo antes de que pierdas el equilibrio y caigas al suelo. Tienes que detenerte y con todas tus fuerzas atraerlo y mostrarle quién es el jefe. Al igual que nuestra preocupación, debemos detenernos e inmediatamente pedirle a Dios que calme nuestras mentes y nos dé la paz y la seguridad de que todo estará bien si confiamos en que Él tiene el control.
 Pídele a Dios Su protección, Su guía y Su paz calmante para traer tranquilidad. Deja de confiar en los qué pasaría si fueran posibilidades seguras y confía en Dios para el aquí y ahora, disfrutando de la tranquilidad en tu mente para que puedas concentrarte en los momentos que te traen alegría y felicidad mientras estás en la presencia del Señor. Fija tus oídos y ojos en Jesús, concéntrate en lo bueno y apóyate en Su consuelo y Él te afirmará y apoyará con Su amor hasta que tus preocupaciones desaparezcan.