EMPODERANDO VIDAS CON UN PROPÓSITO:
¿Tu actitud revela quién eres? ¿Estás llevando en tu comportamiento personal algún fruto que refleje el espíritu de Dios?
Tu actitud es una expresión directa de tu vida de pensamiento. Tengo que examinarme detenidamente a mí misma cuando pienso en esta afirmación. ¿Qué está sucediendo hoy en mi vida de pensamiento? A veces puedo tener una mala actitud porque las cosas no necesariamente se ven brillantes y hermosas afuera o en mi vida. Necesito renovar mi mente en Cristo todos los días, se necesita un esfuerzo concienzudo.
Cuando mis pensamientos no van en la dirección correcta de honrar a Dios, mi actitud es amarga y pobre. Cualquier pensamiento de Dios que honre el fruto produce una gran actitud. Esos frutos de gozo, paz, mansedumbre y más se encuentran claramente expresados en la palabra de Dios.
“Lo que llevamos en el corazón, lo llevamos en la cara”. Alguien dijo una vez esa declaración y se me quedó grabado.
Mi pastor dijo, deje de decir: “No puedo” y comience a decir: “Puedo hacer TODAS las cosas a través de Cristo”.
Deja de decir “si” … y comienza a decir “lo haré por la gracia de Dios”. Deja de decir “es imposible” y declara “NADA ES IMPOSIBLE para los que creen”.
Y recuerde esto, no pienses en ti sin educación porque Dios nos dice en Santiago 1: 5 que si alguno de nosotros carece de sabiduría, podríamos pedirla a Dios y Él nos la dará generosamente si se la pedimos. Él promete y Dios cumple su promesa con nosotros. ¿Alguna vez necesitamos tener malas actitud con habilidades como esta?
Se un ejemplo para todos los creyentes en lo que dices, en la forma en que vives, en su amor, su fe y su pureza. (1 Timoteo 4:12) NTV
En todo lo que nos sucede en el día a día, hay una oportunidad para tener gozo con la perspectiva correcta y la actitud mental correcta. Rodéete de otros que derramarán sobre ti sus grandes actitudes sobre tu vida y el camino cristiano de la fe.
Si te sientes deprimida, recuerda que tu actitud puede marcar una gran diferencia para ti y los demás al avanzar por fe.