3 de noviembre del 2021

by Kimberly Hobbs 

EMPODERANDO VIDAS CON UN PROPÓSITO:
Cada uno de nosotras trae su propio exceso de “equipaje” a la vida cristiana
y sin mayores ajustes (que todos necesitamos), terminamos cargando con el peso y no experimentando la “vida abundante” que Dios quiere que tengamos. ¿Cómo podemos si todavía nos aferramos a nuestro “equipaje” innecesario?
No somos dos iguales, entiende esto. Venimos en todas las formas y tamaños y con diferentes intereses, dones y habilidades.
Así que debemos aprender a seguir a Jesús por nuestra propia individualidad pero dejar atrás el así llamado pesado y pesado “equipaje”. El equipaje de cada persona es diferente.
Jesús te alcanzará y te tocará como una mujer, llamada a pertenecerle. Él suplirá todas tus necesidades, sanará tu enfermedad y te mostrará amor mientras te enseña a dar fruto.
“El que no carga su cruz y me sigue, no puede ser mi discípulo”. Lucas 14:26
Y … sobre nuestro equipaje …
“Cualquiera de ustedes que no renuncia a todo lo que tiene, no puede ser mi discípulo”. 14:27
Jesús puso el listón más alto de lo que cualquiera de nosotros puede saltar por nuestra cuenta. Debemos aferrarnos a sus enseñanzas, amarnos unos a otros, dar fruto, pero dejar todo nuestro exceso de equipaje y llevar nuestra propia cruz y seguirlo. ¿Podemos hacer esto?
Jesús simplemente nos pide que cambiemos nuestras prioridades de lo que alguna vez fue importante para nosotros; a Su abundancia fructífera que cambia la vida, provee amor y es mucho más fácil de llevar que cualquier “bagaje” al que sigamos aferrándonos.