EMPODERANDO VIDAS CON PROPÓSITO:
La inmoralidad sexual está saturando nuestro mundo. Seamos todos conscientes de que no hay salida a la inmoralidad sexual sin consecuencias. Muchos de ustedes pueden compartir historias del doloroso dolor de corazón que resulta del pecado sexual.
Si lees mi historia en Tears to Triumph, verás que las consecuencias de mi pecado sexual no fueron fáciles de atravesar. Mi precio a pagar fue alto. Incluso mientras camino en libertad y perdón hoy y mientras sirvo en el ministerio, a veces todavía me salen lágrimas por el arrepentimiento.
Las consecuencias no son algo fácil de manejar, pueden ser inquietantes para nuestra alma. Dios nos advierte contra este pecado con tanta fuerza en Su Palabra porque Él sabe que las consecuencias de los pecados sexuales son letales.
Las consecuencias del pecado sexual invaden el alma. El precio es alto. ¡La fuerza contra nosotros es fuerte! Incluso vemos niños que están enfrentando este mal, lo vemos en adolescentes, adultos jóvenes y en matrimonios. El bombardeo de la tentación está en todas partes. Chicas, hay que luchar!!!
El camino de Dios para nuestras vidas es la pureza sexual. Tu armadura debe ponerse para tal batalla contra nuestros cuerpos. ¡deben permanecer puras hijas de Dios!
Dios desea que vivamos siempre en pureza sexual. Debemos negar el pecado sexual en cada intento que surja.
La palabra de Dios dice: “Huid de la inmoralidad sexual. Todo pecado que el hombre comete está fuera del cuerpo; pero el que comete inmoralidad sexual peca contra su propio cuerpo. (1 Cor. 6:8)
El cuerpo no es para la inmoralidad sexual sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo. (1 Corintios 6:13)
¡Dios promete una vía de escape de esta tentación! (1 Corintios 10:13.)
Si no escapas de este pecado, o si vives complacido con este pecado en tu vida y no lo entregas a Dios a través del arrepentimiento y el cambio, traerá muerte. (Santiago 1:14-15).
Estas son palabras fuertes, pero Dios me obliga a compartirlas hoy. Estas son las palabras de Dios de las Escrituras.
Ruego que todas prestemos atención a la advertencia. Algunas de nuestras damas están pasando por esto en este momento. ¡Mi corazón sufre por ti porque sé que la tentación está a tu alrededor!
Por favor, comprende, Dios es fiel. ¡Él te ayudará, pero DEBES poner en práctica tu fe! Debes parar. No más excusas. De nuevo, lea 1 Corintios 10:13.
Oro por cualquiera de mis hermanas que esté lidiando con este pecado que golpea y destruye.
Si te puedo ayudar, Comunícate conmigo a : Kimberly@womenworldleaders.