EMPODERANDO VIDAS CON UN PROPÓSITO:
Escritora invitada de hoy: Laurie Sammarco, Pembroke Pines, Florida.
(2 Crónicas 16: 9)
“Porque los ojos del Señor se extienden por toda la tierra para fortalecer a aquellos cuyo corazón está plenamente comprometido con Él”.
Nuestros cuerpos pueden cansarse, nuestras mentes pueden ceder ante la derrota y nuestras esperanzas pueden debilitarse por las muchas pruebas que enfrentamos, pero solo una palabra del Señor puede intercambiar esos pensamientos. Puedes reclamar tu victoria en el Señor. Tiene el poder de fortalecer y generar resultados que pueden cambiar tu perspectiva. Todo lo que se toma se devuelve diez veces. Nada es desolador a los ojos del Señor porque sus manos han logrado la perfección en todo lo que toca.
Podemos preguntar “¿Cuánto más Señor?” y Él responde dándolo todo. Quiere que le des tanto como Él te ha dado. Al darlo todo, someter todos sus miedos, errores, heridas y pruebas, Él a su vez cambia los patrones de destrucción a los de cambio milagroso.
¿Cansada de luchar contra esos pensamientos internos ofensivos, esas inseguridades que te ahogan en el dolor, esos sentimientos inadecuados de indignidad? Recoge la armadura de Dios y pelea la batalla con la fuerza de Dios. No cedas a los estándares de este mundo. Aférrate a la vara y al bastón del Señor que te brinda descanso, seguridad en cada paso y guía a lo largo de las pruebas más duras.
Nunca ha habido una batalla más digna de pelear que la que salva al alma del abandono. Dios te redimirá y te dará el valor y la durabilidad para enfocar tus pensamientos en Él y en el poder que irradia de Él. Apóyate en él, confía en él, busca su rostro y no te rindas. Dios te bendecirá si te entregas a Él.
Garantizado.