EMPODERANDO VIDAS CON PROPÓSITO:
“Amamos porque el nos amo primero.” (Juan 4:19)
Las acusaciones contra nosotros por parte de la familia pueden ser brutales. Todos hemos tenido nuestra parte de lo que reparten aquellos a quienes amamos. ¿Podemos superar los comentarios cortantes de aquellos que nos fallan y luego liberarlos a una vida de oración e intercesión por ellos?
Cuando oramos por aquellos que nos han agraviado, le permitimos a Dios el control que Él dice que le pertenece.
Rechaza el complejo de inferioridad que puedas haber desarrollado. Derriba lo que la gente trata de infligirte que te causa inseguridades.
¡Abraza tu autoridad en Cristo! Estás sentado con Él. Tienes un lugar en Su mesa de gracia. No tienes nada de qué avergonzarte cuando estás viva en tu Salvador.
Me ha tomado años profundizar en la Palabra de Dios y esconderla dentro de mi corazón para combatir las mentiras del enemigo. Le pedí a Jesús que me hiciera valiente, que me mantuviera firme en la verdad y resistiera las falsas acusaciones. Pero tuve que pedir ayuda para hacer todo esto con amor. Ese es el desafío.
Aunque Dios nos sana instantáneamente, todavía tenemos que practicar nuestro comportamiento amoroso frente a aquellos que nos acusan o nos hacen daño.
Nunca dejes de intentarlo. Nunca dejes de creer.
“Amamos porque el nos amo primero.” (1 Juan 1:9)