EMPODERANDO VIDAS CON PROPÓSITO:
“Salir de la Depresión”
Me encantaría escucharte decir “Soy demasiado bendecida para estar deprimida”. ¿Podemos todos esforzarnos por mantener una actitud positiva y mostrarle al mundo que estamos caminando en el “gozo” del Señor?
Necesitamos mantener latiendo el corazón agradecido y permitir que la gratitud cambie nuestras circunstancias. Todos tenemos dificultades que soportar. Acabo de pasar por uno recientemente con ambos padres luchando contra el covid y necesitando cuidarlos durante muchas semanas, sin fin durante todo el día. ¡Difícil, sí! ¡Deprimente, sí! ¿Dios me tenía en ese lugar? ¡Sí!
Las luchas son reales, y no queremos que nadie encubra una existencia dolorosa sino un cambio de actitud del corazón para que puedas enfrentar tu tormenta y dirigir tu enfoque en Jesús y Su Palabra es clave. Hacerlo con un corazón agradecido puede ayudar a mejorar cualquier situación de preocupación, depresión, miedo y ansiedad.
Cualquiera de ustedes puede tener un ministerio justo donde está en este mismo momento si quita el enfoque de sí mismo y ofreces compartir tu corazón y compartir el amor a través de historias que tienes de tu pasado con otros.
No historias de todos tus problemas, ¡nadie quiere escuchar eso! Pero comparte las verdaderas bendiciones de Dios dentro de tus historias. ¡Hace que busques a Dios en cada situación que hayas encontrado, incluida la que puedes estar enfrentando ahora mismo! A cada uno de nosotras se nos ha dado este único día en el que podemos respirar aire. ¡Te lo da Dios, estás viva! Esa es una historia en sí misma. ¡Tienes una historia!
Es a través de nuestras vidas imperfectas, de nuestras dificultades, de nuestros capítulos más rotos, que la fidelidad de Dios se manifiesta en nuestra existencia. ¡Encuéntralo y compártelo!
¡Otros necesitan escucharlo y estarás caminando en bendiciones antes de que te des cuenta!
Ahora bien, el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí está la Libertad.
(2 Corintios 3:17)
¡Libérate, encuentra alegría en cada situación! El Espíritu mora en ti, ¿no es así?
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