EMPODERANDO VIDAS CON UN PROPÓSITO:
ESCRITORA INVITADA: Sara Sahm – Mujeres líderes mundiales que sirven con un propósito.
“MOMENTOS DE ENSEÑANZAS”
“Empiece a los niños por el camino que deben seguir, e incluso cuando sean mayores no se apartarán de él”. (Proverbios 22: 6) NVI
El año pasado pasé por un período oscuro de depresión y ansiedad. Los pensamientos que inundaban mi mente no eran de Dios, pero no sabía cómo acallarlos. Un dulce amigo me dio una lista de pensamientos negativos y los correspondientes versículos de la Biblia para combatir esos pensamientos. Nunca había hecho algo así antes, pero funcionó. No de inmediato, pero con el tiempo he comenzado a reemplazar las mentiras con la Palabra de Dios.
(Efesios 6:11) La NVI dice: “Ponte toda la armadura de Dios para que puedas enfrentarte a los planes del diablo”.
Más adelante, en el versículo 17, se nos dice de nuestra mayor arma: “La espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios”.
Me di cuenta de que nadie me había enseñado a defenderme espiritualmente, ¡y yo también tenía que enseñarles a mis hijos! Es natural evitar cosas que no entendemos completamente, así que tal vez eso es lo que hice. Pero Dios sabía esto y nos dio un manual para esta vida temporal. Se dice que mientras los niños son pequeños, ¡seguimos siendo los expertos!
Quería aprovechar eso y encontrar una manera de impartir el concepto de llevar cautivos nuestros pensamientos y reemplazarlos con la Palabra de Dios y enseñárselo a mis hijos. Así nació esta canción Warrior.
Recientemente tuve la oportunidad de cantarla con mi hija para su clase. Me conmovió mucho cuando me preguntó si iba a asistir a la semana de ayuda a la comunidad y me sugirió que cantara una canción.
Sabiendo que la mayoría de los padres vendrían para compartir sobre ser enfermera, policía, bombero, etc., me sentí no calificada como ama de casa para presentar algo. Su pregunta me ayudó a ver que mi pequeño ministerio de composición de canciones realmente me calificó y me impulsó a ir.
Pude hablar con los niños sobre la armadura de Dios y dejar la escuela sabiendo que planté una semilla.
Ese día el compartir fue una bendición y casi me lo pierdo porque tenía miedo de ser diferente. Si me hubiera retenido porque me sentía incompetente, mi hija nunca habría aprendido las lecciones de vida que espero que haya aprendido ese día.
Tenemos que cantar sobre la Biblia y predicar con el ejemplo y que está bien hablar de Dios. Pude mostrarle que tener esperanza en Jesús es algo de lo que debemos estar orgullosos, y que los días que no sentimos esperanza la podemos encontrar nuevamente en Su Palabra. Sé que mis dos hijas tienen esta canción memorizada y “lista” para cuando la necesiten. Lo mejor de todo: mi hija experimentó la bendición de proclamar la verdad de Dios a los demás.
Mis hijas vieron mi batalla con la depresión y han visto cómo luché y cómo todavía lucho todos los días, es una batalla en curso. Como padres, creemos que deberíamos tener todas las respuestas, pero está bien hacerles saber que a veces no es así. Camina humildemente con tu Dios y predica con el ejemplo. Espero que mis hijas me vean caminando con honesta humildad y apoyada en el Señor con todas mis fuerzas porque ahí es donde me espera la fuerza.
Es mi esperanza que sus ojitos vean a una madre que predica con el ejemplo, mirándome en la Palabra de Dios y recogiendo diariamente mi escudo y mi espada. Es mi oración que puedan aprovechar cualquier momento de enseñanza para que cuando se encuentren cara a cara contra el enemigo, estén listas para luchar como un guerrero.
Haga clic en el enlace de abajo para ver el video con Sara , su hija y la canción cantada en la escuela.