EMPODERANDO VIDAS CON PROPÓSITO:
La validación es una forma en que todos podemos sentirnos bien con nosotros mismos. ¿Te levanta el ánimo cuando otro te reconoce en gran manera? ¿Cómo le pasas esto a otra persona y lo validas?
Conviértete en una persona sociable que atraiga a otros hacia ti. Desarrolla la honestidad, la vulnerabilidad y la franqueza con las personas acerca de ti mismo. Luego atráelos con tu bondad y amor y expresa ese gesto a los demás.
Sea el ejemplo. Conviértete en una persona extremadamente accesible. A medida que tenga un espíritu más abierto, la gente naturalmente querrá estar con usted, a su alrededor o involucrarse en lo que le apasiona.
Haz que tu meta sea encontrar algo bueno en todos. A medida que te conozcan mejor y los valides, asegúrate de decirle a la persona lo que has visto en ellos que te permite compartir y decir las grandes cualidades que tienen. Esto es algo que permite que nuestra hermandad se una por una causa y un vínculo común. Se crea unidad, confianza y servicio.
Ten en cuenta que las personas ayudarán a respaldar lo que puedan ayudar a crear. Si te ven usándolos para ayudarte y los has validado, su confianza crece. Cuando saben que alguien los aprueba, aumenta su confianza para hacer más y más. Aún mejor, la confianza en sí mismos en quienes son en Cristo y para que Él los creó para ayudará a crear y crecer sin límites.