EMPODERANDO VIDAS CON UN PROPÓSITO:
Muchas de nosotras caminamos por esta tierra tratando de encajar como una pieza en un rompecabezas. ¿Por qué?
Creo que es porque todos luchamos con la “necesidad” de encajar. Tratamos de ser la persona que todos los que nos rodean quieren que seamos.
Señoras, no fueron creadas para ser una mujer débil e insegura, fueron creadas para ser una vasija fuerte. Una que pueda soportar la furia del mar. Una fuerza fuerte y poderosa que tiene PODER para hacer cosas increíbles y resistir fuerzas increíbles.
Todas debemos enfrentar los lugares profundos de nuestro corazón que nos asustan. Una vez que lo hagamos y se revele que no es más que miedo reprimido adentro, suelta esas cadenas que te atan. Deja de esconderte y mira el autodescubrimiento que ves a través de los ojos de Dios. Sus ojos de amor para ti. Su amor es perfecto.
Se sincera acerca de tus batallas y enfréntalas con tu Salvador. Jesús ya lo dio todo. No tienes que “encajar” en una pieza de rompecabezas y en el rompecabezas de la vida.
“Así, todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, que es el Espíritu.”
2 Corintios 3:18 NVI
Eres tu propia creación, por Dios. No eres una pieza para encajar en el rompecabezas de otra persona.