2 de junio del 2021

by Kimberly Hobbs 

EMPODERANDO  VIDAS CON UN PROPÓSITO:
Como mujeres líderes mundiales, debemos ser oyentes, creyentes y hacedoras de la Palabra de Dios. Si no lo somos, deberíamos preguntarnos si realmente somos sus seguidores.
Jesús hace una declaración:
“El que es de Dios, oye las palabras de Dios; por tanto, ustedes no oyen, porque no son de Dios”. (Juan 8:47)
Todas deberíamos encerrarnos a pensar si somos nosotras. ¿Alguna vez te has detenido a escuchar este versículo por un minuto?
 Una vez que hemos escudriñado nuestro corazón y hemos confirmado que estamos enfocadas en Cristo y solo en Él, debemos llevar Su luz en nuestras vidas dondequiera que vayamos. ¡Eso significa siempre!
 Necesitamos dedicar tiempo a la Palabra de Dios para poder distinguir la verdad de una mentira. Cuanto más nos acerquemos a Jesús, más verán los demás nuestro deseo de ser como Cristo con compasión, esperanza y propósito.
 Otros pueden darse cuenta de lo que se están perdiendo si observan que nuestras vidas se alinean constantemente con la palabra de Dios. Somos una luz en este mundo, o al menos “deberíamos serlo”.
Mantente firme en la Palabra de Dios y que sea el antídoto contra las tinieblas. Ora sin cesar y persigue a Jesús con fe inquebrantable, entonces sin duda alguna tendrás un impacto en vidas por la eternidad.
¡Nuestro Dios reina, sí, nuestro Dios reina!