EMPODERANDO VIDAS CON UN PROPÓSITO:
¿Tienes el valor de ser testigo de Cristo dondequiera que te envíe?
Dios nos usa como mujeres para cumplir su propósito diariamente.
Él nos da poder, nos llena y nos unge cuando pedimos ser llenos del Espíritu Santo. Dios es fiel a Su voluntad en nuestras vidas, ¡Él es Dios!
Cada mañana, mientras me pongo mi armadura de Dios, le pido al Espíritu Santo que me guíe durante mi día. NO me pierdo ni un día. ¡Dios está a cargo de mí porque le pido que lo esté! Le pido que tome el control mientras le entrego mis propios deseos y mi propio control.
Sí, le digo esto verbalmente a Dios, lo necesito, ¿y adivinen qué? Veo que suceden cosas milagrosas todos los días en mi vida debido a eso. No es por mi PODER sino por el PODER de Aquel que reside en mí.
Dios hará lo que solo Dios puede hacer mientras obra dentro de ti. Él todavía está trabajando en PODER hoy a través de Sus creyentes. ¡Te ruego que seas uno de los que se rindieron a tu Rey!
Porque no es por medios humanos, el poder o mente humana, sino por el poder ilimitado del Espíritu Santo que el reino del Reino de Dios avanza en la Tierra. Jesús construye su iglesia a través del Espíritu Santo. El poder del Espíritu Santo obra dentro de Sus hijos si reconoces que Él está allí. Él te da la opción de elegir a quién servir. Pregúntele y dile que tu deseo es servirle hoy y todos los días.
Por favor, no olvides incluirlo diariamente en tus oraciones. ¡La Trinidad está en Uno! Padre hijo Espíritu Santo.
Recuerda Efesios 3:20. Él hará más de lo que puedas imaginar trabajando en ti y a través de ti si se lo permites.